En el mundo empresarial, pocos logran equilibrar las exigencias de dirigir una empresa con las responsabilidades de ser padre.
Juan José Meza Nuñez, ingeniero y director general de Grupo SITPE, es uno de esos pocos. Su trayectoria como papá empresario es un testimonio de dedicación, sacrificio y un fuerte sentido del equilibrio entre la vida familiar y laboral.
Para Juan José, ser empresario y padre es un trabajo que requiere constante capacitación y adaptación, «tienes que seguirte capacitando, estar a cargo de la parte familiar y empresarial y sacrificar muchos momentos,» comenta.
Este equilibrio no sería posible sin el apoyo incondicional de su esposa, la madre de sus hijos, “creces con ellos como familia, es la forma en la que puedes brindarles mejores oportunidades,» destacando la importancia de una base familiar sólida para el éxito profesional.
La disciplina empresarial que Juan José aplica en Grupo SITPE también se refleja en su hogar, “existe esa ordenanza y las jerarquías,» explica.
Sin embargo, reconoce que a veces los conflictos entre padres e hijos no deben trasladarse a la empresa y viceversa, desde su perspectiva, la empresa y la educación de los hijos deben manejarse con la misma rigurosidad y principios.
Juan José tiene claro que sus hijos deben desarrollarse en lo que ellos deseen, “a mí me encantaría que ellos lograran desarrollarse dentro de la misma empresa, pero si ellos quieren ser futbolistas, astronautas, nosotros los vamos a apoyar para que ellos lo hagan posible”, este enfoque liberal permite que sus hijos exploren sus pasiones y busquen sus propias áreas de oportunidad, un valor fundamental en la filosofía de su familia.
Como líder de la empresa familiar Juan Jose y su familia están considerando que se de en un futuro el relevo generacional, «el cual debe tener el mayor compromiso y responsabilidad hacia la empresa y su continuidad»
Es posible ser un papá empresario y estar presente en la vida de los hijos, aunque esto demande sacrificios. Juan José admite que muchas veces debe ver crecer a sus hijos a través de videollamadas, pero siempre hace todo lo posible por estar con ellos.
«Uno tiene que hacer todo lo posible por estar con ellos”, recordando que la presencia y el apoyo son fundamentales para el desarrollo emocional y personal de los hijos.
La historia de Juan José Meza Nuñez es un ejemplo inspirador de cómo se puede ser un empresario exitoso y un padre presente y comprometido. Su enfoque en la capacitación constante, el apoyo familiar, la disciplina y la preparación para el futuro de Grupo SITPE demuestra que, con dedicación y equilibrio, es posible triunfar en ambos ámbitos. Su trayectoria no solo sirve como modelo para otros empresarios, sino también para cualquier padre que busque ser una figura significativa en la vida de sus hijos mientras persigue sus propias metas profesionales.